Algunas técnicas para formar mejores hijos.

Muchas veces hemos escuchado que los hijos son el reflejo de sus padres, y aunque muchos se resistan a aceptarlo, no hay verdad más absoluta que esa, entendiéndose por padres no solo a quienes le dieron la vida, sino a todo aquel que ejerció dicho rol con el hijo al convivir con él.
Tan grande es la responsabilidad, que podemos asustarnos, no saber que hacer, culpar a los demás e incluso llegar a no hacer absolutamente nada para guiarlos, caotizando aún más la situación. Sin embargo, mientras más nos capacitamos, más claro será el camino y mejor será el resultado.
La llegada de un nuevo ser a la vida de los padres, implica generar algunos cambios en el hogar, por lo tanto es necesario que usted:
· Establezca prioridades en su vida. Haga una lista en orden de importancia, de todos los aspectos y funciones que usted debe cumplir a lo largo de su vida. Por ejemplo: educación, salud, trabajo, economía, familia, etc, etc. Muchas veces solemos establecer prioridades tomando en cuenta al trabajo y al aspecto económico en primer lugar, sin embargo la experiencia nos enseña, a veces demasiado tarde, que la prioridad deben ser nuestra pareja y nuestros hijos. Por supuesto, sin descuidar otras áreas importantes. El equilibrio es la clave.
· Ejerza su autoridad con reglas. En todas las familias, padres e hijos deben tener claro que cada uno de los miembros tiene una función que cumplir dentro y fuera de casa. En los hogares conocidos como funcionales, quien cumple el rol de “cabeza de la familia” es el padre innegociablemente, pero este, al tener que implementar normas y reglas generales para su familia, no lo hará arbitrariamente, o según su conveniencia, para esto él necesitará llegar a acuerdos con su esposa, determinada desde siempre como su “ayuda idónea” al momento de tomar decisiones. El establecer reglas, horarios y responsabilidades es la muestra de amor más grande que un padre puede tener para con su hijo. Regirse a normas fomentará su sentido de la disciplina, se sentirá más seguro, aumenta su autoestima. Por supuesto, las reglas varían de acuerdo a la edad de los hijos y pueden resultar muy sencillas y hasta divertidas y van desde: ir a dormir a las 9pm, para los niños de edad escolar. Mantener el orden y el aseo de su habitación, etc.
· Individualidad. No sobreproteja a sus hijos. No los convierta en seres dependientes. Bríndeles la libertad de aprender a vivir. Llámelos por sus nombres, evite los apodos y los mimos. Ofrezca su ayuda solo cuando por situaciones externas el niño no puede, (por ejemplo, si no alcanza por su baja estatura a agarrar algún objeto), pero si él puede hacerlo, no le brinde ayuda.
· Dele muchas vitamina NO. Aún cuando usted pueda darle todo lo que pide, enséñele que no siempre en la vida podemos obtener todo lo deseado. Recuerde que usted no le será eterno. Esto lo ayudará a saber que existen límites y saber manejarlos le dará seguridad y equilibrio. Dele menos cosas y más afecto, más tiempo. Juegue con él, converse con él, evite los besos en la boca, aunque suelen ser muy dulces, los niños deben saber que los besos en la boca son propios del amor de pareja y usted definitivamente no lo es.
· Suspenda las dosis de drogas electrónicas. Los videojuegos, la televisión, computadora y otros son adictivos. Ningún niño, de ninguna edad puede tener acceso a más de una hora diaria de todos estos implementos. Proporcione a cambio, más deportes, actividades artísticas, alimentación sana, etc.
· Permita que su hijo sea realmente un niño y no un adulto pequeño. Tolere los floreros rotos, el jugo regado y más. Los niños aprenden por los errores cometidos. No lo castigue. Recuerde que muchas veces los adultos, aún siendo adultos cometemos muchos errores, mucho más graves…..como ser infieles, por ejemplo. Y castigamos por que el niño perdió su borrador????
· Enséñele a ser valiente, a defenderse, a enfrentar sus problemas y no a evadir responsabilidades.
· Expanda el mundo de su hijo. Salga en familia un fin de semana, busque tiempo especial para salir a solas con su hijo. Mientras más lugares conozca, más aprende de la vida, de la gente, de la cultura. Mientras más conoce, más opciones tendrá, más oportunidades vendrán, y mientras más opciones….más posibilidades de escoger lo mejor tendrá.
· Alimente su fé en Dios, fé en un ser superior y fé en sí mismo. Enséñele a dar gracias por todas las bendiciones que recibimos diariamente. Bendiga los alimentos en familia.
· Dígale todos los días cuanto lo ama.

Miriam Padilla.
Psicóloga Clínica.
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